El partido del jueves por la noche de la semana 7 promete un reencuentro significativo que muchos esperan desde que se dio a conocer el calendario: Sean Payton visitará a los New Orleans Saints. El entrenador regresará a la que fue su casa durante 15 años, pero esta vez lo hará como rival, liderando a los Broncos de Denver.
Su regreso aporta una carga emocional que otorga un carácter especial al encuentro. El entrenador es recordado por haber llevado a la franquicia al único Super Bowl de su historia, un logro que nunca se olvida. Sin embargo, la situación actual de los Saints no da lugar a sentimentalismos. El equipo dirigido por Dennis Allen ha encadenado cuatro derrotas consecutivas y no puede permitirse una más.
Nueva Orleans ha pasado de ser uno de los conjuntos más competitivos de la NFL a ocupar un lugar entre los peores en un abrir y cerrar de ojos. En las dos primeras fechas de la temporada, mostraron un desempeño dominante, pero desde la semana 3, el equipo ha perdido el rumbo y aún no encuentra la salida de este bache.
Los Saints llegan al duelo contra los Broncos con un quarterback suplente
Debido a la lesión de Derek Carr, el novato Spencer Rattler asumirá la titularidad por segunda vez consecutiva. En su debut ante los Buccaneers, logró lanzar un pase de touchdown, aunque dos intercepciones empañaron su actuación. Enfrentarse a la formidable defensiva de Denver no será una tarea fácil. Los Broncos tienen una media de 170 yardas aéreas permitidas por partido, la quinta mejor cifra de la temporada. Sin embargo, los Saints pueden aprovechar el talento del corredor Alvin Kamara, quien ha acumulado siete touchdowns en lo que va del año, y buscar formas de avanzar con eficacia.
Por otro lado, los Broncos buscan recuperar el ritmo tras ver cortada su racha de tres victorias consecutivas. La defensiva de los Saints es la más vulnerable de la liga, permitiendo un promedio de 411.2 yardas por partido. Este panorama podría favorecer al novato Bo Nix, quien tiene el potencial de hacer un gran partido.
Bo Nix ha demostrado ser capaz de mover el balón y anotar puntos, con cinco touchdowns por pase y tres por carrera. Sin embargo, deberá mejorar en el cuidado del balón, pues ya acumula cinco intercepciones.
